Representación gráfica de la evolución del feto

El avance más importante en el desarrollo de tu bebé durante esta etapa consiste en la aparición de una capa grasa de mielina. Ésta ayudará a transportar los mensajes provenientes de su cerebro a través de sus nervios hasta sus músculos y distintos miembros.

Los brazos de tu bebé ya son suficientemente largos como para que sus manos se unan por encima de su cabeza. Mide 10 cm y pesa 50 gr.

Sabías que…

  • A pesar de que tu bebé se encuentra dentro de una atmósfera acuática (líquido amniótico), no necesita respirar porque el oxígeno que necesita lo recibe directamente de ti, a través del cordón umbilical y la placenta.
  • El líquido amniótico en el que flota actúa también como conductor de sonido, por lo que dentro de algún tiempo será capaz de escuchar tu voz y el latido de tu corazón.
  • Es posible que durante este segundo trimestre tu bebé tenga hipo. Aunque no hay una razón científica que explique este suceso, se cree que este mecanismo enseña al feto a respirar y que el hipo que sufrimos después de nacer, es un reflejo residual de este proceso fetal.
  • La piel de tu bebé comienza a cubrirse con lanugo, una capa de pelo extra fino que le ayuda a regular su temperatura corporal.
  • La amniocentesis es la prueba prenatal más frecuente y consiste en la obtención de una muestra del líquido amniótico que rodea al bebé. Suele realizarse a partir de la semana 14 ó 15 del embarazo hasta la semana 26. Este procedimiento dura cerca de 20 minutos y se realiza con ayuda del aparato de ecografía con el fin de encontrar el mejor lugar donde el líquido pueda extraerse sin tocar al feto ni a la placenta. A pesar de no ser un procedimiento muy doloroso, tu médico puede aplicarte anestesia local para evitar cualquier molestia. Esta prueba es recomendable si:
    • Tienes más de 35 años.
    • Tienes antecedentes familiares de Síndrome de Down.
    • Tuviste anteriormente un bebé con algún defecto del tubo neural, entre otras.

¿Quieres saber más sobre tu embarazo?