Los mejores alimentos para la gripe

Los mejores alimentos contra la gripe

No hay duda: lo mejor para combatir la gripe es seguir una alimentación variada, equilibrada y saludable.

La gripe es una enfermedad infecciosa respiratoria aguda, altamente contagiosa, la cual es causada por un virus perteneciente al género ‘Influenza’. Tiende a evolucionar en epidemias, que pueden llegar a ser globales en aquellos momentos en los que el virus acaba infectando a personas que nunca antes se habían contagiado. Luego, llegamos al momento de hablar de pandemia  (como la que vivimos actualmente de coronavirus).

La gripe estacional  es común que suela hacer estragos entre los meses de noviembre y abril, en el hemisferio norte, y entre los meses de abril a septiembre, en el hemisferio sur. Algo que no ocurre en los países tropicales, en donde el virus suele circular a lo largo de todo el año. 

Se estima que, solo en nuestro país, varios millones de personas se ven afectadas cada año durante las típicas epidemias invernales, las cuales pueden llegar a durar una media de nueve semanas, aproximadamente.

Curiosamente, los síntomas de la gripe son similares a los que surgen cuando tenemos un resfriado común. Sin embargo, existen algunos elementos particulares que pueden ser de cierta utilidad para diferenciarlos.

Después de ingresar en el cuerpo, el virus es capaz de multiplicarse en la membrana mucosa del sistema respiratorio, donde genera una serie de lesiones, especialmente en los pulmones, y provoca además una reacción inflamatoria. Posteriormente, cuando el cuerpo empieza a reaccionar con la finalidad de combatirlo, es cuando surgen algunos de sus síntomas más típicos: fiebre que puede ser alta (40 ºC), escalofríos, dolores musculares, fatiga (astenia), dolor de cabeza, tos seca y nariz obstruida.

El período que va entre el contagio y la aparición de los primeros síntomas de gripe (lo que médicamente se conoce como período de incubación) es realmente corto, oscilando básicamente de uno a tres días solo. Además, es común que los síntomas surjan de forma repentina.

En lo que a los síntomas de refiere, no hay duda que uno de los principales síntomas que ayudan a diferenciar la gripe del resfriado comúnes la evolución de la fiebre, ya que se trata de una evolución verdaderamente particular y característica: disminuye alrededor del cuarto día para luego volver a aumentar entre el quinto y el sexto día. 

Por suerte, en ausencia de complicaciones, aunque es cierto que puede acabar resultando muy molesta (es imprescindible el descanso para intentar recuperarse), la gripe se cura rápidamente. No obstante, el período de convalecencia se caracteriza por ser bastante largo, yendo de diez a quince días.

¿Y el tratamiento? El manejo de las personas con gripe se realiza principalmente mediante tratamientos médicos destinados a combatir los síntomas, en especial la fiebre (antipiréticos) y el dolor (analgésicos). Eso sí, al tratarse de una infección vírica, los antibióticos no se recetan nunca, a menos que se produzca algún tipo de complicación infecciosa en la que el médico considere que debe ser tratada con este tipo de fármacos.

Aunque puede llegar a prevenirse fácilmente adoptando una serie de medidas básicas de prevención y de higiene (exactamente las mismas que seguimos actualmente cada día con la finalidad de reducir el riesgo de infección por nuevo coronavirus, motivo por el cual casi no se han diagnosticado casos de gripe en nuestro país este año), también existen ciertos alimentos que pueden ser de muchísima utilidad a la hora de combatir la gripe y reducir sus síntomas.

Y es que, como coinciden en señalar los especialistas, al fortalecer nuestro sistema inmunológico estaremos fortaleciendo las defensas, por lo que es común que nuestra salud, y la propia infección respiratoria en sí misma, mejore mucho.

Caldo de pollo

Algún que otro estudio ha investigado acerca de los beneficios del pollo, y del caldo de pollo en sí, descubriendo que contiene una serie de compuestos con cualidades antiinflamatorias que ayudan a reducir muchos de los síntomas más molestos asociados a la gripe. Motivo por el cual, de hecho, se convierte en una de las comidas típicas cuando estamos agripados o resfriados.

El líquido caliente calma las membranas mucosas que son propensas a inflamarse durante el período con gripe, mientras que el vapor que emerge de él ayuda a humedecer las fosas nasales. Además, es de muchísima ayuda a la hora de reducir la inflamación.

Ajo

El ajo es un alimento repleto de beneficios, reconocido durante años por sus cualidades para combatir la gripe y los resfriados, ya que fortalece el sistema inmunológico, promoviendo la producción de glóbulos blancos. 

Además, también actúa como antibacteriano y antiviral, y puede ser consumido de muy diferentes maneras, aunque no hay duda que una de las mejores opciones es consumirlo de la misma manera que si fuera un fármaco: es decir, tragarlo acompañándolo de agua. Eso sí, si no te gusta su sabor, puedes escoger las cápsulas disponibles que encontrarás en herbolarios y farmacias.

Jengibre

Destaca por ser un alimento muy utilizado en la medicina oriental tradicional. La raíz de jengibre es particularmente útil e interesante a la hora de suprimir la tos, especialmente cuando se opta por un té de hierbas elaborado con este rizoma, al ayudar a desbloquear los bronquios y reducir muchas de las molestias respiratorias comúnmente asociadas.

Además, no solo es un alimento eficaz a la hora de combatir la fiebre causada por la gripe, también es muy útil para reducir los síntomas asociados a las náuseas.

Frutas y verduras frescas

Las frutas y verduras frescas ideales para combatir la gripe y el resfriado común son aquellas que poseen un elevado contenido de antioxidantes naturales, así como vitaminas y minerales. Destacan especialmente el kiwi y los cítricos (por su elevado contenido en vitamina C), además de la col rizada (kale), el brócoli o el plátano.

Miel

Se caracteriza posiblemente por ser uno de los alimentos más conocidos a la hora de reducir los síntomas asociados al dolor de garganta, gracias a sus cualidades antiinflamatorias. Pero también proporciona beneficios antioxidantes y antisépticos muy interesantes, que actúan en las vías respiratorias y es de mucha utilidad para tonificar la circulación sanguínea.

¿Lo mejor? Es muy fácil de consumir, ya que se puede tomar sola, con la ayuda de una simple cuchara, o para endulzar deliciosos tés de hierbas (por ejemplo, puede ser muy interesante para endulzar el té de jengibre).